Por Valia Carmenate, terapeuta y maestra de Reiki.
La Navidad amaneció y con ella la vida resurge, el corazón despierta en un nuevo palpitar, la luz toca a su puerta y solo tú la has de dejar entrar.
La mente en su inquietante andar, guarda silencio porque llegó la Navidad, ¿qué me traes? Pregunta en su curiosidad, oh Luz que tú has de dejar entrar.
Este regalo es divino y por derecho aquí está, abre tu puerta más allá de la Navidad, que esta luz brille en toda la inmensidad.
La luz de tu ser esperando está, a un llamado que tú pronunciarás, despierta que solo no estás, el camino juntos hemos de transitar, despierta que llegó la Navidad y somos uno para cantar a la libertad.
Buscar afuera no es la verdad, entra a tu corazón y se te revelará la existencia de ese mundo que llena en su totalidad.
La conjunción planetaria al despertar nos llevó, cuando Júpiter y Saturno su estrella nos iluminó.
Como flor en primavera renaciendo va, el amor que nos conecta a toda la humanidad, como hermanos que somos en fraternidad, caminemos juntos sin mirar atrás.
Perdona por todo a los demás y a ti mismo por piedad, perdona para que puedas avanzar, perdona y se te perdonará, ese es el sendero que a la luz nos llevará.
A tu tierno corazón que escondido está, libera las capas de dolor que lo han de despertar.
Canta al amor, canta en esta Navidad para que perdure por la eternidad, el amor que somos que se asome ya, canta, canta a la libertad.
Nuevos mundos listos están para compartir la flor de la unidad.
En honor a los hermanos que en el valiente regreso al hogar, se adelantaron durante este año y más atrás, regalemos en silencio una chispa de amor para su camino guiar, que nuestro despertar sea el mensaje que ellos en la tierra nos quisieron enseñar.
La madre Tierra en su infinito amor nos acoge y nutre, nos alienta a dar lo mejor, ser uno con ella limpiando el dolor.
La voz de la esperanza se está haciendo escuchar, atentos tus oídos, llegó el despertar, de ti depende todo, de mi y los demás.
El futuro anunciado abrió su gran portal, con la luz brillante en su intensidad nos abraza a todo el que quiera avanzar
La conciencia del Yo Soy te llama, despierta mi dulce amor, despierta es la hora de echar a andar
Autora:Valia Carmenate
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